Durante el pasado mes de mayo 2020 se vendió el último ejemplar de Vampys: Guía de Cine de Vampiras 1914-2000 , segunda entrega de la serie Cineguías , publicada en octubre 2005 por Ediciones Morphues Projects, impresa por Digital Image y distribuida por SD Distribuciones. En sus 76 páginas repasé 115 películas dedicadas a las vampiresas, desde las pioneras Theda Bara en la película norteamericana A Fool There Was (1914/Frank Powell) ; Irma Vep (Juliet Musidore) vampiresa del serial francés Les Vampires (1915/Louis Feuillade) y la primera encarnación cinematográfica de Lilith con la actriz Elga Beck en la película austriaca Lilith und Ly (1919/Erich Kober) hasta las eróticas vampiresas de la saga regida por el francés Jean Rollin, pasando por todas las versiones de Carmilla, las hijas de Drácula, sus novias y otras muchísimas hembras sedientas de sangre que nos sirvió el cine norteamericano y europeo... Tras el éxito que supuso la primera entrega de Cineguías dedicada al cine ufológico con Alienígenas en la Tierra, quise abordar el tema del vampirismo desde un ángulo poco habitual. Por esos años descubrí que el vampirismo tiene un origen femenino en contra de todo lo que siempre se ha dicho. Drácula no fue el primero. Antes de Drácula hubieron imperios poderosisimos de estas criaturas de la noche, regidos por voluptuosas e hipnóticas vampiresas. En homenaje a este número de Cineguías que tuvo tanta aceptación (llegué a editar 2000 ejemplares para distribución nacional) le dedico este pequeño reportaje a las deseables y peligrosas vampiresas del mito y la leyenda las que, sin duda alguna, dieron pie a las vampiresas del cine y la literatura.
Ya en las antiguas escrituras hebreas se nombra a un terrible demonio nocturno con forma de hermosa y lasciva mujer que rapta niños para devorarlos y seduce hombres para violarlos, beberles la sangre, comerse sus entrañas y descuartizar sus usurpados cuerpos para darles de comer a su monstruosa prole. En algunas antiguas páginas se la nombra como la primera esposa de Adán. El origen de la oscura leyenda de Lilith , como la primera esposa de Adán, proviene de una interpretación del Génesis 1.27 "Creó, pues, Dios al hombre a su imagen ; a su imagen de Dios lo Creó; hombre y mujer los Creó"; explicación que vino mucho antes de la clásica de que Dios vió que Adán estaba muy solo y vio que no era bueno para él así que lo sumió en un sueño y de una de sus costillas le dió una esposa a la que llamó Eva. No obstante, la presencia de Lilith no quedó en suposiciones o malas interpretaciones del Génesis. Existe la tradición judía de poner un amuleto alrededor del cuello de los niños recién nacidos con el nombre de tres ángeles que lo protegerán de las Lilins; las Hijas de Lilith, criaturas obscenas , seductoras, devoradoras de sexo, sangre y almas de niños, hombres y mujeres. A través del mito de Lilith, la Madre de los Vampiros y las Criaturas de la Noche, fui descubriendo toda una galería de monstruos femeninos que harían caer bajo sus fatales encantos hasta el más curtido de los guerreros.
Empecemos este repaso con las bellas Vlokoslak de Serbia, también conocidas como Mulas. Aparecen como jovencítas vestidas de blanco. Están activas tanto de día como de noche y pueden convertirse en caballos blancos, ovejas o visiones fantasmagóricas. A menudo atacan en grupo. Las Striges son vampiras-bruja de Italia. Se dice que se transforman en grandes cuervos nocturnos y emiten estridentes graznidos. Pueden convertirse en atractivas mujeres de plumas negras y alimentarse de sangre humana. Según las antiguas leyendas estas vampiresas supieron expandir su casta por otras tierras. En Grecia se las conoció como Strige y en Rumania como Strigoi, justamente la estirpe de vampiros que investigó Bram Stoker para sus novelas de vampirismo. Sin movernos de Rumania también encontré a los Murony; una poderosa estirpe de vampiros de Valaquia, al sur de Rumania. Tienen la habilidad de transformarse en gatos, sapos, murciélagos y en enjambres de insectos chupadores de sangre. De día descansan en sus criptas, momento en el que se les puede eliminar. Por otro lado los rumanos Muroii , son una de las primeras castas de vampiros que supieron organizarse en sociedad y expandieron su reinado por media Europa. También de Europa se habla mucho de las vampiresas-demonio Succubus, que pueden adoptar cualquier forma humana para lograr sus objetivos. Siempre mantienen relaciones sexuales agotadoras con sus víctimas alimentándose de su energía sexual. Tras la cópula, una vez su amante a fallecido, bebe toda su sangre. La clásica mitología greco-romana está repleta de monstruosas vampiresas. Por ejemplo, están las Empusa; vampiras-demonio hijas de la diosa Hécate, con capacidad de transformarse en perra, vacas y bellas y seductoras doncellas. Se acuestan con hombres para chuparles la fuerza vital hasta la muerte. Fueron muy temidas en la antigua Grecia y Roma, su estirpe se expandió por todo el Mediterráneo y parte de Europa. También tenemos a las infernales Erinias. Nacidas de la sangre de Urano, las erinias eran tres: Alecto, Megara y Tisifone. Se trataba de tres diosas-vampiro con la misión de vengar, castigar y reparar los desafueros de los humanos. Moraban en los Infiernos y tenían una debilidad: eran devoradoras de las energías mágicas del hombre; la sangre y el semen. Las primeras referencias literarias de estas vampiras están en Las Euménides de Esquilo. Por citar a una monstruosa vampiresa greco-romana más, está la Lamia que siempre se presentaba con el torso desnudo y medio cuerpo de animal, normalmente de serpiente, aunque también podía presentar forma de centauro, de león alado o de ave de presa. Bebían la sangre de sus presas y comían su carne. No obstante, su alimento favorito eran los bebés de los que no dejaban ni los huesos. Estas malditas criaturas salían de sus oscuros escondrijos, como norma ruinas o cuevas muy grandes, a partir de media tarde. Pero no todas las vampiresas europeas provienen de Grecia, Italia y Rumania, al norte también forjaron un camino de sangre y pasión varias criaturas femeninas dignas de mención. En cuentos y leyendas de Escocia encontramos a las Baobhan-Sith, también conocidas como Damas Blancas. Se trata de vampiras-hada que viven en los bosques y en lo alto de las montañas. Su belleza, sus bailes y cantos atraen a los viajeros que son seducidos. Tras hacer el amor y dejarlos dormidos, les succiona hasta la última gota de sangre. Estás vampiras también aparecen en grupo. La Dearg-Due fue una temida vampira celta. Según cuenta la leyenda un día fue enterrada viva en Waterfold (Irlanda) una hermosa muchacha, cerca de una pequeña iglesia y de un viejo árbol. A partir de ese día, en determinadas noches del año, esa chica se levanta de su tumba convertida en Dearg-Due, que significa "chupadora de sangre roja". Sin irnos de Irlanda , también encontré a la Leanhaum-Shee, una joven y atractiva vampira que vive en una casita en medio del bosque. Con su poder de seducción hace desaparecer a los hombres atrayendolos a su alcoba ,donde los retiene durante días bajo el efecto de un encanterio. Una vez ha drenado toda su fuerza vital los devora sin dejar ningún rastro. Otra poderosa vampiresa europea la encontramos en la Mara de Dinamarca. De día es una hermosa muchacha y por las noches se convierte en un monstruo chupador de sangre. Su estirpe se expandió por el norte de Europa y llegó hasta Canadá. Para terminar con las vampiresas europeas mencionar a la Bruxsa de Portugal. Esta vampiresa también posee la facultad de hacer vida normal de día y de noche transformarse en una monstruosa ave negra con características a murciélago. Asalta a los viajeros perdidos y cansados haciéndolos morir de miedo. Luego se alimentan de su sangre y sus entrañas. Aunque su alimento favorito son los bebés, detalle por el que me hace pensar que se trata de algún descendiente de las mortales Lamias.
Podría seguir con las vampiresas de Asia, de las Américas, de Rusia y de otras partes del globo, pues en todas las más antiguas leyendas y mitos existen diosas, brujas, reinas o bellas mozas de hipnóticas curvas que son monstruos de pesadilla. Pero , ¿y si dejamos todo esto para una futura publicación dedicada de nuevo a las vampiras? Es una opción, claro. Y nada descartable. Os seguiré informando.
No hay comentarios:
Publicar un comentario